Para que luego digan: el Louvre publicará un manga de Hirohiko Araki en la colección que mantiene con Futuropolis. Ojito que la colección es extraordinaria, sólo hay que ver el Periodo Glaciar de Crecy o el Les Sous-sols du Révolu de Mathieu. A ver si así van cayendo los prejuicios absurdos contra el tebeo japonés.